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La empresa cubana MINREX dice que no existe “un síndrome de La Habana”, sino más bien un “síndrome de Washington”.
El director del Centro Cubano de Neurociencia afirma que el trabajo periodístico que vincula a Rusia con incidentes de salud no tiene base científica.
Subdirector de Estados Unidos Del Ministerio de Asuntos Exteriores La empresa cubana Minrex, Johanna Tablada, acusó a los medios de esto Vincularon a Rusia con los incidentes de salud reportados por funcionarios estadounidenses Conocido como “Síndrome de La Habana” para intentar presentar al gobierno cubano como una amenaza a la seguridad nacional estadounidense.
“Nuestra reacción es preocupante”, dijo el funcionario cubano a The Associated Press después de que se hiciera pública la investigación que duró un año. Lo de adentro, El espejo y el programa CBS 60 minutos.
“Intenta presentar (al gobierno de) Cuba como una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos.“Si bien no posiciona a Cuba como el supuesto actor principal, sí posiciona al territorio cubano como un lugar donde potencias extranjeras pueden realizar acciones contra Estados Unidos”, se quejó Tablada.
El funcionario cubano del Minrex también negó la existencia del “Síndrome de La Habana”.bautizado con ese nombre porque fue el escenario donde funcionarios estadounidenses y canadienses reportaron por primera vez síntomas (migraña, mareos, náuseas y pérdida de visión, equilibrio y audición, entre otros).
“El síndrome de La Habana no existe, porque no está registrado (Como una enfermedad)”, dijo Tablada, y agregó: “Realmente fue Síndrome de Washington desde el principio“, aunque el gobierno estadounidense reiteró su confianza en la conclusión a la que llegaron sus propias agencias de inteligencia.
En un informe de marzo de 2023, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) afirmó que era poco probable que los síntomas experimentados por el personal estadounidense se debieran a un ataque hostil. La investigación periodística realizada por los tres medios de comunicación puso en duda este informe.
Además, no sólo el personal de Washington sino también el personal canadiense mostraron síntomas, aunque en menor medida.
El director del Centro Cubano de Neurociencia, doctor Mitchell Valdés Sosa, también rechazó los resultados de la investigación de prensa. Subrayó que no tiene base científica.
“Desde el punto de vista científico, no hay fundamento”, afirmó el neurocientífico que lleva años involucrado en la investigación de los extraños síntomas que muestran funcionarios de las embajadas de Estados Unidos y Canadá en Cuba.
“Creo que esta investigación periodística no presenta elementos graves, y sobre todo, que hay una nueva enfermedad provocada por una energía misteriosa y esto también… Diplomáticos, al menos los de Cuba, fueron atacadosValdés Sosa agregó: “Los síntomas son muy diversos, problemas de equilibrio, problemas para dormir, mareos, dificultades para concentrarse… Muchas enfermedades pueden provocar esto”.
“Cada vez que” la historia comienza con la muerte “se prepara un espectáculo”, afirmó el científico, lamentando que esto provoque que se oscurezca todo lo aprendido sobre este “incidente de salud”.
Las declaraciones de Tablada y Valdés Sosa se suman a las del vicepresidente del Minrex, Carlos Fernández de Cossio.Quien calificó este lunes los hallazgos de los tres medios de comunicación en su cuenta en la red social X como una “operación de desinformación”.
Las tres declaraciones concuerdan con las del portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, quien calificó la investigación como una “acusación infundada e infundada”.
Aunque los primeros casos de funcionarios estadounidenses y canadienses que desarrollaron síntomas como mareos, migrañas, pérdida de visión, etc. salieron a la luz en 2016 y fueron reportados en la sede diplomática ubicada en La Habana, la investigación incluye un hecho ocurrido dos años antes en Frankfurt, en Alemania. Este caso no ha sido confirmado ni negado por el gobierno de Estados Unidos.
pero, El Ministerio de Defensa admitió que un empleado que asistió el año pasado a la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Lituania tenía síntomas similares. Que sufren los funcionarios y sus familias desde 2016. El caso de Lituania es el último caso conocido públicamente.
El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, reiteró el lunes la confianza del gobierno en el informe de 2023 de la CIA.
La portavoz de la Casa Blanca, Karen Jean-Pierre, confirmó que era importante para la administración de Joe Biden proteger a sus empleados. Destacó la prioridad dada a “las investigaciones sobre las causas de los incidentes sanitarios anormales”. Sin embargo, optó por remitir las cuestiones relacionadas con la investigación periodística a la Dirección de la Oficina Nacional de Inteligencia.
El oficial retirado del Pentágono Greg Edgren, quien dirigió la investigación militar sobre el “Síndrome de La Habana”. Cuyas declaraciones compartí 60 minutosDijo que el gobierno había puesto un listón muy alto para las pruebas. La razón, a su juicio, es que al reconocer que los síntomas fueron provocados por un agente enemigo, Las autoridades estadounidenses tuvieron que cuestionar su capacidad para proteger a sus ciudadanos.
“La razón por la que (los límites) se han elevado tanto es porque nosotros, como país y como gobierno, no queremos enfrentar realidades muy duras”, dijo Edgren, que se encuentra en sus respuestas a las siguientes preguntas. : ¿Podemos proteger a Estados Unidos? ¿Sucedió esto debido a fallos masivos de contrainteligencia? ¿Podemos proteger el suelo estadounidense y a nuestra gente en suelo estadounidense (refiriéndose a las embajadas)? ¿Estamos bajo ataque y, de ser así, es esto un acto de guerra?
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